Cuando hablamos de growth hacking en marketing, nos referimos a uno de los términos que más ha llamado la atención en los últimos años.
Su objetivo es mirar las cosas desde otra perspectiva. Se utilizan estrategias de marketing tradicionales, pero se busca generar un efecto más inmediato y escalable.
En Blue Growth somos especialistas en esta disciplina, así que te contaremos brevemente de qué se trata.
¿De qué se trata el growth hacking en marketing?
El growth hacking es una disciplina de marketing que tiene como objetivo acelerar el crecimiento de las empresas y marcas. Para ello se toman en cuenta factores como la inversión, el tiempo y el esfuerzo.
Y es que, a diferencia del marketing tradicional, el growth utiliza una metodología que reduce la inversión, disminuye el tiempo y evita el esfuerzo innecesario para generar crecimiento.
Esta metodología incluye estrategias que pueden modificarse hasta conseguir los resultados deseados. En primer lugar, se plantea una hipótesis basada en cómo se puede conseguir el objetivo planteado; luego se realiza la verificación.
Si la hipótesis se comprueba, se siguen realizando pruebas para generar resultados. Por el contrario, si no ofrece beneficios, se pasa a nuevas formas de solucionar los problemas de crecimiento.
Como ves, el growth hacking en marketing tiene, incluso, paralelismos con el método científico.
¿Cómo funciona? ¿De qué manera se logran los resultados?
Para alcanzar los objetivos de crecimiento, en growth hacking se plantean KPIs.
Cada KPI sirve para medir un elemento clave que conlleve a la consecución de objetivos. Por ejemplo, si una marca desea conseguir más reconocimiento, uno de los KPIs planteados puede ser el número de visitas a la web.
Los KPIs funcionan para medir y verificar que la estrategia funciona.

Otro punto clave es la automatización de procesos. Debido a que se está en constante prueba de estrategias, no todo puede realizarse de forma manual. La automatización ayuda en gran medida a alcanzar los objetivos más rápidamente.
Finalmente, el análisis de datos. Es importante conocer qué quiere decir cada indicador, sus fallas, su éxito, cómo mejorar y cómo hacer más escalable una estrategia.
El análisis de datos siempre será fundamental en el growth hacking en marketing.
¿Funciona para todas las empresas?
Por supuesto. Como te contamos en nuestro artículo sobre los embudos de venta, una estrategia de crecimiento puede aplicarse a cualquier negocio cuyo objetivo esté bien definido.
No importa el sector o tamaño de la empresa. Lo importante es contar con una serie de KPIs definidos para lograr el objetivo planteado: vender más, aumentar rentabilidad, generar conocimiento de la marca, lanzar un producto, etc.
¿Quieres una estrategia de growth hacking en tu negocio?